La Biblia dice, “Porque tanto amó Dios al mundo, que dio a su Hijo unigénito, [Jesucristo] para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna” (Juan 3:16).
Jesús dijo, “Yo he venido para que tengan vida, y la tengan en abundancia,” lo que significa una vida completa y llena de propósito (Juan 10:10).
Pero aquí está el problema: